El viejo truco ya no cuela
La emigración es uno de los problemas que más preocupa a los españoles. El salmantino Caldera nos contó, hace casi dos años, la milonga: después de su regularización masiva de inmigrantes se resolvía el problema. Hizo oídos sordos a las advertencias de Europa y criticó la oposición frontal del PP.
Como suele ser normal en el desgobierno zapateril, la medida de Caldera fue un fracaso y los hechos han demostrado que si antes venían pateras, ahora lo hacen pateras y cayucos cargados hasta los dientes de subsaharianos que llegan al país de Jauja.
Tras la metida de pata, Rodríguez propuso al PP un gran pacto para la inmigración. El viejo truco: La cagan y luego invitan buscan socios para compartir culpas.
Como el PP se negó a ser cómplice del desaguisado, dio pie a Pepiño para acusar a los populares de obstaculizar la labor del gobierno, de deslealtad y de no querer resolver el problema de la inmigración. De dar la espalda a los españoles. Esta es la segunda parte del viejo truco.
Podría seguir con la verborrea retorcida y calculada de este iletrado que sirve como retahíla siempre que necesitan desviar la atención y acusar a todos con tal de eludir su responsabilidad.
Siempre tienden la misma cortina de humo para tapar los desatinos de Rodríguez y su pandilla de ministros escasamente preparados.
Aquí les dejo otro ejemplo: El miércoles se consumará uno de los actos más indignos de los últimos tiempos, permitir que los asesinos terroristas tengan voz en el parlamento europeo a través del presidente del Estado español. Rodríguez, una y mil veces, ha declarado que está del lado de las víctimas y en contra de ETA. ¿Quién se puede creer este embuste que ha repetido cientos de veces?
La jugada sucia, una vez más, parece que va a salirle mal y es que el parlamento europeo, lejos de dejar sólo al PP y a las víctimas, como ha pretendido zETApé , les va a apoyar en contra de los intereses zapateriles y de la ETA.
Al verse de nuevo con el culo al aire, busca de nuevo el viejo truco del gran pacto con el PP. Los peperos, escarmentados de las trampas y engaños zapateriles, han declinado llegar a un acuerdo previo al encuentro en el parlamento europeo, aunque han estado cerca de dejarse engañar como siempre.
No contentos, este domingo, movilizaron a su prensa afín que es casi toda. El País decía en primera página que el Papa Benedicto y la Iglesia aprobaban la negociación que el gobierno está llevando a cabo con los asesinos.
La iglesia se ha apresurado a desmentir la información. Pero la inyección de intoxicación estaba inoculada. Los periodistas del Prisoe son auténticos especialistas que tomaron la alternativa con los terroristas suicidas que nunca existieron en los trenes de la muerte.
Aquí va el tercer ejemplo: Después de ocho años de gobierno Aznar sin que se meta la mano en la caja aparecen ya los primeros problemas.
En Ciempozuelos dos exalcaldes socialistas han sido descubiertos ingresando cheques suculentos en sus cuentas corrientes por un pelotazo urbanístico que tiene todas similitudes a la financiación irregular de FILESA.
Miente que algo queda, es la máxima rubalcabiana que tan buen resultado sigue dando a los socialistos que se aprovechan de los sociatontos. Y si la mentira no produce todo el efecto deseado siempre queda proponer un gran pacto imposible de cumplir por el PP y luego acusarles de obstaculizar deslealmente al gobierno.
Y lo han vuelto a hacer. ¡¡¡Como los peperos parecen tontos!!!
Han propuesto un gran pacto al PP que haga frente a la corrupción urbanística. Vamos, como lo del código de buen gobierno que se inventaron al principio de la legislatura, para dar a entender al españolito de a pie que los peperos gastaban mucho y ellos no iban a ir por ese camino. La austeridad y contención en el gasto es una de las máximas de María Teresa. La cumple a raja tabla. Cada día luce un modelito de alta costura y complementos que valen un ojo de la cara y que pagamos usted y yo. O como J. Lizavesky, el secretario de estado para el deporte, que llevó a su señora y a varios amigos a gastos pagados al mundial de baloncesto de Japón. ¡Y qué gastos! Pagando billetes de avión de más de un millón de pesetas, hoteles de más de 600.000 pesetas la noche o comidas de más de 50.000 el cubierto.
Rajoy, con muy buen criterio, ha declinado el envite. Ha argumentado que hay que dejarse de palabrería y buenas intenciones que sólo son un nuevo engaño y hacer trabajar a la justicia que es lo que se hace, dicho sea de paso, en cualquier país de nuestro entorno.
¡Que trabaje la justicia que, a poco que quiera, tiene filón y más que habrá!
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home