La clave del "proceso de paz" contenida en un bote de tipex

Mucho se ha hablado y escrito sobre el famoso informe del ácido bórico y lo que queda, pero llegados a este punto me gustaría recapitular lo sucedido hasta hoy y exponer mis conclusiones.

A vuela pluma recordaré que:

1.- El 21 de marzo de 2005 los tres peritos, Isabel López, Pedro Manrique y Manuel Escribano elaboraron un informe a instancias de sus superiores en el certificaron la aparición de una sustancia poco frecuente entre los terroristas, el ácido bórico, y que casualmente se encontró en dos pisos francos, en principio bien distintos, uno de etarras y otro de islamistas.

2.- El informe se lo presentaron a su jefe, el comisario Ramírez, que les pidió que lo rehicieran porque discrepaba de su contenido, a lo que los peritos se niegan.

3.- Los superiores de Ramírez, los comisarios Mélida y el jefe de la policía científica, Santano, el que fue entrevistado por Gabilondo, son informados.

4.- El comisario Ramírez, con el beneplácito de sus superiores, se reasigna el caso y quita del informe todo lo que hace referencia a ETA. Este nuevo informe es el que se envía al juez del Olmo y se incorpora al sumario.

5.- Durante el verano del 2006 los peritos se percatan que su informe ha sido manipulado. Se dirigen a su ordenador e imprimen una copia del original, la firman para darle autenticidad y la ponen a disposición del que entonces era su jefe, el comisario Andradas.

6.- El 21 de septiembre el diario El Mundo saca a la luz los dos documentos acusando a la policía de falsificar los informes para ocultar la relación entre ETA y el 11-M.
En este enlace están los documentos original y manipulado:

Pincha aquí

7.- Una semana después Garzón se adjudica, desobedeciendo a sus superiores, un caso que no le corresponde y, haciendo un triple salto mortal con doble tirabuzón, imputa la manipulación a los tres peritos amparándose en que volvieron a firmar en 2006 un informe que hicieron en 2005. A su vez, exculpa a sus superiores.

¿Increíble? No. Garzón.

Cuando ha llegado el caso a una juez no sometida al ejecutivo zapateril, han vuelto las aguas a su cauce. Los peritos, como no podía ser de otra manera, han dejado de estar imputados y los mandos policiales exculpados por Garzón irán a juicio por falsificación, falso testimonio y encubrimiento según el último auto dictado por la juez.

Llegados esta aquí, reflexionemos.

1º Rodríguez ha mantenido contra viento y marea que ETA no tuvo nada que ver en los atentados. ¿Por qué tiene esa certeza? Dicho de otra forma. ¿Qué pasaría si supiera que ha sido la ETA?
Aquí está la clave. Tanto si es verdad como mentira no podría reconocerlo porque el montaje manipulativo con el que llegó al poder, acusando al PP de mentir por insistir en la autoría etarra, deslegitimaría su victoria electoral.
¿Será este el peaje que tiene que pagar Rodríguez para que los etasunos de Otegi no canten?
¿Es este el chantaje por el que tiene que ceder zETApé a todas las pretensiones de Etasuna? ¿A qué espera para ceder el testigo a alguien que puede reconducir esta locura?

2º Parece evidente que hay una orden clara de que desaparezca toda referencia a una posible implicación de ETA en el 11M. Lo que parecería una barbaridad toma cuerpo si el punto anterior es cierto. Aquí surge la siguiente pregunta: ¿De dónde parte esta orden?

3ª Tras comprobar que algunos mandos policiales vinculados tradicionalmente con el PSOE habrían cometido, presuntamente, un delito encaminado a tapar referencias a ETA, parece deducirse que la orden podría partir cuando menos de algún responsable de Interior. ¿El ministro? O ¿más arriba?

4º Si analizamos el informe en cuestión, cuesta trabajo creer que estos mandos policiales se hayan arriesgado a entrar en prisión. Si, finalmente, se demuestra la falsedad documental por tapar un informe que únicamente hacía alguna vaga relación de ETA con islamistas. ¿Por qué ocultarlo? La respuesta nos lleva al punto primero.

5º No han dudado en dejarse por el camino piezas tan valiosas como Garzón y, lo que es más importante, han desprotegido su juego. Se les ha visto el plumero.

6º Si los mandos policiales son finalmente declarados culpables de la manipulación, el jaque será un hecho. La credibilidad en la instrucción del 11 M estará en entredicho. Porque, de la misma forma que este informe habría sido manipulado, podremos pensar que otros documentos emitidos por la policía científica que obran en poder del juez del Olmo estarán también afeitados o sencillamente serán falsos.

Mañana escribiré sobre el papel que han jugado algunos medios de comunicación.

Saber más:

AUTO DE LA JUEZ