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lunes, enero 22, 2007

La debilidad de la “democracia discreta” de Rodríguez

Rodríguez, al comenzar su desastroso mandato, prometió practicar una democracia deliberativa. Ja, ja, bueno también prometió el oro y el moro. Del oro ni rastro y del moro mejor no hablar. Photobucket - Video and Image HostingSe ha convertido en subsahariano, europeo del antiguo telón de acero y latin king como los de Alcorcón.
Como decía, prometió la democracia del diálogo y vaticinaba que convertiría al Parlamento en el centro de la vida política. A toda esta palabrería la envolvió en el papel de regalo del talante embustero.
Rodríguez ha convertido la democracia deliberativa y dialogante en amordazada, ocultista, dictatorial y discreta, la antítesis de la democracia.
En septiembre, el grupo socialista capitaneado por el esquirol comunista López Garrido, intentó silenciar la voz de los representantes del 40 % de los votantes. Para ello, logró el apoyo de seis grupos minoritarios de la cámara, que escasamente representan un 10% de los votantes, silenciando así las denuncias del PP sobre las lagunas del 11 M.
Ahora da un paso más. El miércoles 17, tras la resaca del cara a cara entre Rajoy y Rodríguez del lunes, anunció en un comunicado la creación de un frente político de todos los partidos para aislar al PP y anticipó medidas parlamentarias para que las iniciativas del PP ni siquiera sean tenidas en cuenta. Ni siquiera sean debatidas porque, según el ex-comunista López Garrido, crean “crispación” y provocan “debates estériles y desmoralizadores”. De esta forma pretenden boicotear todas las iniciativas parlamentarias del PP en materia antiterrorista.
¿Dónde está la democracia deliberativa? ¿No parece una democracia excluyente? ¿Cuál es la diferencia con las dictaduras bananeras? ¿Dónde dejan el diálogo estos dictadorzuelos? ¿Sólo para los terroristas, los criminales o los okupas?
¡Lo que va a tener que aprender Hugo Chávez de Rodríguez!
Según el ¿demócrata? ex-comunista estas medidas son para “evitar que se escenifique una contienda aborrecida por los demócratas”. ¿En qué ha quedado la democracia deliberativa que propuso Rodríguez?
En realidad su propuesta fue una obviedad. Cualquier democracia que se precie, y la que capitaneaba Aznar lo era, debe ser deliberativa. Sin embargo, aquella murió en Atocha junto a 192 inocentes para dar paso a la “democracia avanzada” de Rodríguez que consiste en amordazar a la única oposición que existe, en negar el derecho a debatir que consagra la democracia para que la dictadura zapateril sea un hecho.
El PP se está enfrentando a una mayoría absoluta pactada entre el PSOE y los minipartidos independentistas que chupan alegremente de la teta que generosamente les brindan los socialistas sin importarles que la vaca está enfermando muy rápidamente. La situación actual recuerda los movimientos políticos llevados a cabo por el Frente Popular en los prolegómenos de la Guerra Civil.
La democracia que le gusta a Rodríguez es la oscurantista, la del río revuelto, la del acuerdo sin luz ni taquígrafos, la de la reunión secreta y discreta.
Así salió adelante el estatuto de Cataluña, tras una reunión secreta con Arturo Más. Así fue la reunión que mantuvo hace unos días con Juan José Ibarreche, en secreto.Solo que al secreto le ponen el adjetivo de discreto. Otro engaño más a costa del talante.
¿En qué no nos han mentido? Es la democracia discreta de Rodríguez.

martes, enero 16, 2007

La debilidad de un presidente

Si ayer escribía sobre la debilidad del gobierno, hoy, después de escuchar las explicaciones y las soluciones que el presidente de este gobierno ha dado en sede parlamentaria he de concluir que la debilidad se hace patente en Rodríguez.Photobucket - Video and Image HostingMás si cabe tras el vapuleo inmisericorde al que le ha sometido el líder de la única oposición que existe en España.
Hemos escuchado a un presidente que ha pedido perdón por una frase desafortunada en la que anunciaba lo bien que estábamos y lo mucho mejor que íbamos a estar. Sin embargo, no ha pedido perdón por lo más importante, que es por su fracaso en el mal llamado proceso de paz.
Suyo habría sido el éxito de haber conseguido que los asesinos depusieran las armas y sólo suyo es el estrepitoso fracaso cosechado por una política que ha sido cualquier cosa menos antiterrorista y que ha terminado con la muerte de dos personas.
Un político honesto, ante un fiasco de este calibre, se iría a su casa. En el peor de los casos, después de reconocer su gravísimo error, volvería al pacto antiterrorista que es el que aglutina al 85 % de los votantes (PP yPSOE).
Pero nada de eso ha sucedido, Rodríguez ha dado por muerto el pacto antiterrorista y aboga por un nuevo pacto con los grupos independentistas y antiespañoles. Los mismos que apoyan a la ETA en sus pretensiones separatistas, me refiero a IU, ERC, BNG, PNV, CiU y la Chunta. Rodríguez ha hablado de alcanzar el máximo consenso y para ello cambia el 85% de los votantes por un 60% (PSOE y la comparsa). Una vez más, bajo su palabrería vacua, subyace el engaño a los ciudadanos españoles.
Después del asesinato de dos personas y la demolición de un edificio valorado en más de 5000 millones de pesetas, que pagaremos todos, después del incumplimiento de los compromisos de fin de la violencia por parte de los asesinos etasunos, a cualquier presidente cabal y decente sólo le habría quedado la promesa ante los españoles de perseguir a los asesinos allá donde se encuentren para ponerlos ante la justicia. Era el momento de actuar, de endurecer las leyes, de enfrentarse al problema y ejercer un liderazgo que la nación reclama y por el que cobra. (Cuando uno no da la talla en el puesto de trabajo le ponen de patitas en la calle)
Pero nada de esto ha sucedido. Al contrario, Rodríguez ha anunciado diálogo y paz, mucha paz.
De nuevo mentira y engaño.
No se puede dialogar con quien te mata, si no se cumple con lo que te pide. Rodríguez confunde diálogo con humillación y con cobardía.
No se puede hablar de paz cuando no existe guerra, si no unos que matan y otros que ponen la nuca, y para más escarnio se acusa a estos últimos de no querer la paz porque se resisten a poner la nuca.
Ante este desalentador panorama, hemos conocido por medio del diario GARA que Rodríguez ha negociado con los asesinos antes de la falsa tregua, incluso antes de llegar al poder. Mientras firmaba con el PP el pacto antiterrorista que prohibía expresamente mantener contactos con los terroristas, negociaba ya con los asesinos.
El resumen lo ha hecho Mariano Rajoy, que ha estado soberbio, con estas tres frases que quedarán para la posteridad:
-"ETA no está en tregua, nunca más será creíble"
-"Apoyarle a usted es un suicidio en la lucha contra el terrorismo".
-"Si usted no cumple le pondrán bombas y si no hay bombas es porque ha cedido"
Desgraciadamente, esta última es la más significativa y me lleva a pensar que a Rodríguez la ETA lo tiene cogido por los vagones, por los vagones del 11 M.

lunes, enero 15, 2007

La debilidad de un gobierno

En mi anterior post escribía que Rodríguez está noqueado y contra las cuerdas y hoy Rajoy tendrá la posibilidad de mandarlo a la lona y esperar a ver si se levanta después de que el pueblo español le cuente los ocho segundos reglamentarios.
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La situación la veo así:

1º Rodríguez se ha empeñado en buscar la cuadratura del círculo.

No se puede negociar con los terroristas si estos no dan muestras claras de cese de todo tipo de violencia.
El iluminado monclovita no sólo ha mirado para otro lado, sino que nos ha pretendido convencer de la bondad de los asesinos. Incluso a alguno de ellos o a sus representantes les ha llamado hombres de paz. Mientras, los ciudadanos hemos asistido atónitos a como la extorsión a empresarios era evidente, la violencia callejera rebrotaba con fuerza, el rearme de la banda era un hecho incontestable que el gobierno zapateril disculpaba. Para el gobierno había que “constatar” que los responsables del robo de casi 400 pistolas eran los asesinos o los zulos de explosivos de ETA eran “proyectos de zulo para guardar cosas” como aseguró Rubalcaba del zulo de Amorebieta.

2º Rodríguez se ha convertido en rehén de los terroristas.

Da toda la impresión que los de las pistolas son los que marcan los tiempos y el desgobierno va a remolque.
Si Rodríguez declara que el “proceso” va bien, Otegi le corrige diciendo que no se dan los “pasos necesarios para la paz y el avance del proceso democrático de Euskalerría”. (¡Qué desfachatez la de este indeseable!)
Si Rodríguez dice que estamos mejor que hace cinco años, los asesinos le corrigen y lo celebran poniendo un bombazo en Barajas.
Hasta en las comparecencias de zETApé, éste espera a que sean los asesinos los que hablen primero y no se atreve a hablar de terrorismo, habla de violencia. O el subconsciente le traiciona y confunde asesinato con accidente.

3º Rodríguez lleva muchos meses engañando a los españoles con la paz.

Nos vende una falsa paz. Porque, ¿qué es la paz sin libertad? En los cementerios también hay paz. En Cuba también hay paz y en Irán y en Corea del Norte, pero sin libertad. Sin libertad no hay paz.
Nos vende que ETA no mata, bueno, no mataba. Sin embargo, consentía y consiente que muchos vascos no puedan expresarse en libertad. Que vivan amedrentados por los violentos, que un partido democrático, el PP, no pueda completar sus listas de cara a las elecciones municipales porque los afiliados tienen miedo a darse a conocer. Esa es la paz zapateril con la que engaña a los ciudadanos españoles. Su paz es cobardía ante el que amenaza y chantajea.

4º Rodríguez no asume ninguna responsabilidad

Para salir del paso, de la situación de asfixia a la que lo han sometido los etarras, necesita buscar un culpable. Blanco, Rubalcaba, López Garrido o María Teresa se han convertido en los faltones del reino. Su energía la gastan en insultar. Para ellos, el gobierno no es culpable de haberse entregado a la ETA, el culpable es el PP que traiciona al gobierno porque denuncia su incapacidad.
Utilizan el manido recurso de desviar la atención de lo verdaderamente importante para después acusar al PP de desleal, de oportunista, de no querer la paz, además de ser el responsable del hambre en el mundo, del maltrato de las mujeres, los desastres ecológicos, el paro, la educación o de que no llueva si es preciso.

5º Rodríguez pretende aislar, una vez más, al PP.

De esta forma pretende deslegitimar a los populares como si disentir no fuese la esencia de la democracia. Para ello hablan de unidad.
Rodríguez se ha desmarcado del pacto antiterrorista que supuso la unión de PSOE y PP frente a la ETA y a los nacionalistas que maman de la teta del estado. El PP no se ha movido de estas posiciones de firmeza mientras que los socialistas han pactado con los independentistas catalanes, gallegos y vascos reeditar un nuevo pacto en el que excluyen a los populares. En este marco se encuadran los contactos en Perpiñán de ERC y ETA o el pacto del Tinell.
Con catalanes y gallegos gobiernan en estas comunidades y con los vascos del PNV pretenden llegar a un acuerdo en la lucha antiterrorista obviando que los chicos de Arzalluz firmaron con ETA el pacto de Estella de apoyo al independentismo vasco. ¿En qué quedamos? Pues en un PSOE que juega con todas las barajas y con las cartas marcadas. En que Navarra puede caer en manos de ETA con un pacto entre socialistas e independentistas.

6º Unidos, si. ¿En torno a qué?

Si a la derrota de ETA, a que haya vencedores benevolentes y vencidos arrepentidos.

Nunca negociación con los asesinos que no entregan las armas, que hablan de paz, de “su” paz, de la paz zapateril, de esa paz que consiste en claudicar porque una de las partes habla con la otra con una pistola en la mano.

Unidos con el PP que es lo único que nos queda.

Ante esta situación sólo queda que hoy Rajoy de la talla y destape a Rodríguez. Los españoles empiezan a estar maduros y hartos de tanto embuste.
Un país no puede aguantar mucho tiempo así. Por eso Rajoy debe hoy dejar las cosas claras en el Congreso.
¡Ojalá Rajoy este fino!

Excelente artículo

lunes, enero 08, 2007

No hay resto de explosivo

Unas horas después de producirse el brutal atentado que posibilitó que Rodríguez esté tirando a la basura varios siglos de historia, los socialistas y su patulea acusaban al gobierno de José María Aznar de falta de información.

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Del 11 al 13 de marzo, cada poco tiempo, aparecía un desconcertado Acebes hablando de Tytadine, de Goma 2, de Goma 2 Eco, de cordones detonantes. Los medios de comunicación, en especial los del grupo PRISA, nos obligaron a los españoles hacer un cursillo intensivo de los distintos tipos de dinamita así como de que asesinos los utilizaban más frecuentemente.
Con estas informaciones y las erróneas que los mandos policiales trasmitían al ministro del interior se acusó al PP de mentir.

Si de algo se puede culpar al gobierno de Aznar, en aquellos trágicos momentos, fue de ingenuidad, de excesiva trasparencia, de honestidad, de maricomplejines.
Nada que ver con la lobreguez de la que hace gala el desgobierno de Rodríguez y a la que nadie exige la claridad necesaria en una democracia que se precie.
Hace más de una semana que ETA continuó con su lucha de destrucción de España y todavía el desgobierno socialista no ha dicho ni qué fue lo que explotó ni qué cantidad.

¿Por qué?

Posiblemente por la misma razón por la que no sabemos que explotó realmente en la masacre del 11 M.


En este enlace se pueden descargar una presentación en la que se prueba el oscurantismo y la manipulación que rodea a la escasa información de los explosivos del 11 M

Haz clic aquí. Lo puedes descargar.