Es lo que hay

“El terrorismo islamista es una amenaza que está en todas partes y bajo la cual estamos todos”
"El fundamentalismo islámico debe ser confrontado porque no hay otra opción".

“El mundo está ahora bajo un ataque constante del que debemos defendernos”.
“Occidente no atacó al Islam, sino que nos atacaron ellos".
"No se han condenado las amenazas contra el Pontífice, sólo se ha dicho que eran desproporcionadas".
“La defensa de los valores familiares es ahora la batalla más importante".
"Es muy interesante ver que mucha gente en el mundo islámico reclama que el Papa pida perdón, pero no oigo a ningún musulmán que me pida perdón por conquistar España y estar allí ocho siglos"

Estas son algunas de las frases que Aznar, el mejor presidente que ha tenido España, pronunció en una prestigiosa universidad y que suscribo de principio a fin.
Además, Aznar criticó la "falta de liderazgo en Europa" y la "división" existente en los países europeos.

Se puede dialogar, razonar y llegar a acuerdos con el que esta dispuesto a ello, pero no con el maníaco que jura aniquilarte. Mucho menos si el sujeto en cuestión sólo vive para eso. No se pueden tener contemplaciones porque si bajas la guardia es posible que no tengas otra oportunidad.
Ante el fanatismo del islamismo radical no valen paños calientes. Viven para destruir nuestro modo de vida, que para ellos es satánico. Sencillamente nos odian. Creen que están legitimados por Alá para llevar a cabo esta acción de exterminio y por ello serán recompensados en el paraíso. Es la guerra santa que les impone su religión por eso no dudan en suicidarse llevándose consigo la vida de hombres, mujeres o niños.

Con esta realidad incuestionable podemos meditar cuales son las causas, elucubrar sobre que hemos hecho mal, en si Occidente podía haber estado más acertado con ellos, incluso podemos remontarnos a la época de las cruzadas para justificar el odio al cristianismo.
Pero no podemos quedarnos ahí. Además, es necesario pararles los pies. Occidente no puede cruzarse de brazos ante una amenaza que cada vez es más cierta y más directa. La libertad del mundo civilizado está en juego.
Curiosamente, los que se llaman progresistas, feministas, homosexuales y muchos más “istas”, que defienden a capa y espada a los fanáticos islamistas serán los primeros en perder los privilegios de que ahora gozan para ser eliminados sin contemplación. Es la ley del Islám. Los Zerolos y otros titiriteros, con los “mulás”, tendrían los días contados. La igualdad de la mujer sería entendida como la conciben en Paquistán, donde una mujer violada puede acusar a su asaltante si presenta cuatro testigos varones que den fe del hecho, si no es apedreada. ¿Qué te parece María Teresa? ¿Mal? Pues la homosexualidad femenina todavía la entienden peor.

En lugar de jugar al juego peligroso de la rendición, de la sonrisa tonta y la ceja circunfleja, del talante, del entreguismo y de la cobardía tan característica del zapaterismo haríamos bien en tomarnos en serio las amenazas de los intolerantes islamistas y enseñarles los dientes, pararles los pies y después, sólo después, empezar a hablar y enmendar los errores.

La reacción a las palabras de Aznar no se han hecho esperar. Los progresistas, socialistas, comunistas y otros más “istas”, todos tan camorristas como los islamistas, han calificado las palabras de Aznar como de barbaridad según el comunista catalán Juan Saura. Otros, como el comunista Llamazares, han dicho que son palabras propias del franquismo (¡Qué imbécil indocumentado! Franco mantuvo unas excelentes relaciones con el mundo árabe) o el secretario de Organización del PSOE andaluz, Luis Pizarro, que tachó de "irresponsable, desfasado y fuera de la realidad" el discurso del ex presidente. ¿Fuera de la realidad? ¿Dónde vive este Pizarro?

Pero lo mejor vino de boca de un ex comunista reconvertido a socialista, el portavoz parlamentario del PSOE, antes de IU.
López Garrido ha comparado al ex presidente de los GAL, Felipe González, y su visita al tirano presidente de Irán, el gran mecenas del terrorismo contra Occidente, con Aznar.

Ha afirmado que mientras González hacía una labor de paz , Aznar pronuncia palabras descabelladas.

¡¡¡Por Favor!!! ¿Qué alguien les diga a estos inútiles que paz no es sinónimo de rendición! Emplean la paz con la ETA cuando se rinden y traicionan a mil muertos. Con los islamistas que colaboraron en la matanza del 11 M…
¡Por cierto!, ¿A qué fue Rodríguez a postrarse ante el dictador iraní? ¿A pedirle que los terroristas dirigidos por él en el Líbano no disparen a nuestras tropas?

Sin embargo, lo que más ha jodido a López Garrido es que Aznar haya dicho que lo de la Alianza de civilizaciones es una estupidez.
Sr. Aznar, eso es una obviedad, aunque no por eso menos cierta.